jueves, 14 de junio de 2018

Un nuevo inicio. Una nueva ilusión.

Esta semana se inicia la Vigésima Edición de la Copa Mundial de la FIFA, el torneo más importante de las mejores selecciones absolutas del mundo. Donde Chile no estará, por cierto…
Sin embargo, los Evertonianos miramos con ilusión y ambición avanzar en la Copa Chile del presente año, copa que no hace mucho (aunque se mire con lejanía), premió con pasajes a otra copa: La Sudamericana.



Una de las ventajas de este torneo de clubes de ambas divisiones es que permite muchas veces darle rodajes a jugadores que no ven minutos en el Torneo de Primera. Esto permite potenciar a algunos valores de la cantera y ganar experiencia es partidos de definiciones donde la presión es distinta.
La particularidad que ha tenido en esta etapa la presente edición de la Copa Chile es que muchos equipos de Primera División han decidido darle descanso a los jugadores luego del término de la Fase Regular.
En su última Conferencia de Prensa, el otrora técnico de Everton, Pablo Sanchez, indicó que la Planificación del Club era darle a descanso a los jugadores con más minutos y presentar formaciones alternativas para los partidos de ida y de vuelta contra a Cobresal (puntero de la Primera B), situación donde podían debutar en el primer equipos jugadores como Carlos Moreno, Sebastián Pereira y darle minutos aquellos que no han tenidos tantos minutos durante el 2018 como Camilo Ponce, Ignacio Ibáñez y tantos otros.
Luego, del remezón de la dirigencia, deja su Puesto Pablo Sanchez y, pocos días después, asume Javier Torrente. Cobreloa, Once Caldas y León son sus últimos clubes como “DT”. Rosarino y “Bielsista” como su antecesor, aunque pareciera ser más flexible con los esquemas posicionales tácticos, según sus propias palabras. Con un estilo menos cálido, mirada seria y cara de pocos amigos, parece ya haber dado muestras de su carácter, exigiendo refuerzos que todavía no se ratifican; prioridad para él, un arquero y un defensa central: “Los equipos se arman desde atrás hacia adelante”.
Muy poco tiempo de trabajo y la cita del futbol llegó. Una tierra lejana pero conocida por los de Viña del Mar. Hace tiempo que Everton y Cobresal no realizaban un cruce de coordenadas deportivos producto del descenso del cuadro minero a mediados del 2017.



Un partido de pocas emociones, donde Everton presentó un orden defensivo con mayor solidez que en la últimas fechas de la Fase Regular, con un buen debut de los jugadores antes mencionados: Moreno en Portería y Pereira en la zona central de la defensa. Igualdad a cero que deja a Everton como ganador de la llave, ganando su partido en Sausalito por cualquier marcador. Un nuevo comienzo de un proceso que recién comienza.
En cuanto a la forma de trabajar de Torrente, los cambios parecen apuntar a los trabajos físicos, con el objetivo de que los jugadores no decaigan en el segundo tiempo. Asignatura pendiente del equipo de Viña del mar, que resignó muchos puntos producto de los cambios que se introducían en las segundas fracciones que casi nunca resultaron. El otro sello: el hermetismo. Calramente, Pablo Sanchez era mucho más cercano a los jugadores, prensa e incluso con los propios hinchas. Es que la situación no está para dejar nada al azar: últimos en el Torneo Regular y hace muchas semanas que no se gana un solo partido. Lo que genera el debate, cuánta responsabilidad tiene el cuerpo técnico anterior si los jugadores ahora parecen estar siendo exigidos, ¿recién ahora?
Este viernes a las 20:00 se juega la segunda parte de la llave frente a Cobresal, en donde Everton busca el todo por el todo: ganar, clasificar y, ojalá, volver a encantar a su hinchada. En resumen, un partido de vida o muerte ; como casi todos los del resto de este difícil año.

No hay comentarios.:

Publicar un comentario