La columna de Mauricio Rivera
El mismo día en que cumplí 53 años, la noche del 14 de marzo de 2020; fue la última vez que pude estar en Sausalito viendo a nuestro Amado Everton desempeñarse en la cancha sin poder doblegar a un ordenado Deportes La Serena, quedándonos con la insatisfacción de un Empate 0 a 0.
Una pandemia que nos ha quitado uno de nuestros más grandes placeres, que, por más de 170 días nos ha tenido en un letargo, nostálgico y fome, que sólo se ha visto remecido con la gran campaña de solidaridad impulsada por nuestro club en sociedad con la ONG Twiteros Solidarios, que hizo latir nuestros corazones con un ejemplo que debe llenarnos de orgullo y satisfacción personal.
Pero, sin más preámbulo, hoy nuevamente puedo encender mi computador para comunicarme con la Familia Evertoniana para contribuir con mi pequeño análisis del enfrentamiento que tendremos este Jueves 03 de Septiembre, esperando que el entusiasmo y la disposición que cada jugador ha demostrado durante el período de entrenamiento, se plasme en un gran desempeño y volvamos a la senda de los triunfos.
El rival que nos toca visitar es uno de los equipos más difíciles de Analizar:
Palestino. Un equipo que practica un estilo de juego simple, basado en la tenencia segura del balón, sin arriesgar demasiado y con jugadores que, sin hacer nada extraordinario, se dan maña para llevar el partido a su ritmo y sorprender con una “jugada mágica” de Luis Jiménez o una aparición letal de Leandro Benegas.
El sistema táctico de Ivo Basay es un 1-4-3-3.
Su arquero, Gastón Guruceaga, en el último partido demostró poca seguridad en sus intervenciones. Trata de salir jugando con los pies hacia Guillermo Soto por derecha o Sebastián Cabrera por izquierda, quien salió lesionado y en su reemplazo ingresó Enzo Guerrero. Ambos laterales se proyectan pero solamente cuando la posesión del balón supera la línea de Agustín Farías y César Cortés.
Generalmente juegan a trazos cortos, asegurando la entrega, lo que provoca monotonía en la conducción en el centro del campo. Más arriba espera Luis Jiménez para conectarse y hacer la diferencia, generalmente cambiando la velocidad al buscar a Jonathan Benitez, quién con su habilidad y rapidez trata de descomponer la defensa rival o espera la subida de Cabrera para que se proyecte por su espalda y genere un centro al llegar a línea de fondo.
Si esto no fructifica, bordeando el área se mueven Matías Campos López y Leandro Benegas, quienes buscan quedar frontales al arco para tratar de definir.
Ojo con los tiros de esquina. Generalmente van al punto penal para la aparición de uno de los Centrales, Sergio Felipe o Lucas Acevedo, ambos jugadores son corpulentos para ir al cabezaso junto con Leandro Benegas, y son un factor de peligro al llevarse las marcas y dar la posibilidad de un disparo franco de Luis Jiménez, César Cortés o Agustín Farías. Desde la banca, normalmente se incorpora Renato Tarifeño, que tiene habilidad para aparecer desde el mediocampo en labores ofensivas.
En materia defensiva, Palestino es un equipo estático, tanto Jiménez como Benegas y Campos López corren solamente para adelante. NO colaboran en la marca, por lo que generalmente cuando pierden el balón, dejan expuestos a sus laterales y sobre todo a sus centrales, que demostraron estar fuera de timming y recurren a la falta en forma permanente. El jugador “todo terreno” es Agustín Farías, quien es buen recuperador de balón y junto con César Cortés hacen el nexo con la línea ofensiva, donde espera Luis Jiménez para ser protagonista.
Entonces: ¿De qué manera contrarrestamos este sistema de juego?
i) Por las características del juego rival, el balón se disputará la mayor parte del tiempo en el mediocampo, por lo tanto, es importante presionar la salida del equipo rival, pero sin desgastarse mayormente, porque la mayor virtud que tienen nuestros delanteros es la explosión y la velocidad en contragolpe.
ii) Por el lado derecho de nuestra defensa es donde se producirá la mayor parte del juego ofensivo de Palestino, por lo tanto, es importante poner un Lateral avezado que no le dé espacios a Jonathan Benítez, y debe ser apoyado por nuestro volante central y por el que corra por la banda derecha para evitar que el lateral Cabrera se proyecte por esa banda.
iii) En el lado derecho del ataque de Palestino, Guillermo Soto se proyecta con bastante eficiencia, por lo que Dilan Zúñiga apoyado por Alvaro Madrid, no deben darle espacio para que aproveche su velocidad.
iv) En faenas ofensivas, Everton debe intentar mover con mayor rapidez el balón, generando más vértigo en el juego, para evitar el juego anodino de Palestino, y desorientar a la defensa rival con un permanente movimiento en los puestos de ataque por parte de nuestros delanteros.
v) El factor sorpresa debe venir desde nuestro mediocampo, para romper la línea defensiva rival que es muy estática. Para ello es trascendente la subida constante de Dilan Zúñiga, quien incluso ha convertido un gol en la Cancha de La Cisterna, y, por qué no, esta podría ser una nueva ocasión de enviar el balón hasta el fondo del arco de un dubitativo Gastón Gurustiaga.
Tengo fe que este Reestreno será muy positivo para nuestros colores Oro y Cielo. La duda principal está en la preparación física, que espero haya sido óptima para poder soportar 90 minutos de fútbol y llevar el partido a un ritmo que debe ser impuesto por nuestros jugadores.
Y, por último, es de esperar que haya pasado nuestro período de sequía goleadora y desde ahora en adelante, tengamos la posibilidad de celebrar nuevamente los goles de nuestro Amado Everton, celebrando virtualmente cada uno de los tantos que nos lleven a una seguidilla de triunfos y buenos resultados que nos catapulten a los lugares de avanzada de este torneo de fútbol profesional chileno que tanto anhelamos volver a disfrutar.
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